LONDON FASHION WEEK — Un bar Coyote en Londres: así fue la presentación de Sinead Gorey

© Conor Beary

Es curioso cómo surge la inspiración a veces. Puede ser algo meramente intuitivo, una iluminación repentina o, simplemente, fruto de haber sido testigo de algo que logra marcarte tanto que tu cuerpo (y mente) necesita expresarlo a través de tu arte. Este último ha sido el caso de Sinead Gorey, la diseñadora británica que ha convertido su nueva colección en todo un universo inspirado en “El Bar Coyote”.

¿Quién no ha visto “El Bar Coyote”? Más allá de ser una de las películas referentes de principios de los 00s, este film marcó un antes y un después a nivel estético. Con una escenografía de lo más cuidada y detallada, “El Bar Coyote” se ha convertido en todo un universo propio, en el que los crop tops, los flecos, los jeans de campana y los cinturones anchos de pedrería son los protagonistas principales. Por ese motivo, no es de extrañar que Gorey lo haya escogido como hilo conductor de su propuesta otoño-invierno 2023, presentada en la pasada edición de la London Fashion Week.

El universo de Sinead Gorey

Si hay algo que caracteriza a la semana de la moda de Londres es que las presentaciones juegan en otra liga. Para ellos, la moda no es simplemente algo que tenga que mostrarse, sin pena ni gloria, en sombrías pasarelas, sino que son capaces de crear todo un concepto alrededor de su colección y te teletransportan hasta ella. Y así lo hizo Sinead Gorey.

La artista logró trasladarnos al Bar Coyote desde un edificio londinense de dos plantas ubicado en el 23/25 Paul Street que fue capaz de convertir en todo un garito texano, gracias a una iluminación tenue y rojiza, a unos cócteles maravillosamente refrescantes y a unas tarimas en las que las modelos no duraron en subirse a bailar durante horas al ritmo de temazos como “Hit the Road, Jack”, “These Boots Are Made for Walking” o “Man, I Feel like a Woman”, todas ellas vestidas con la nueva colección de Gorey en la que las aberturas, las transparencias, el animal print y el colorido no se echaron en falta.

Con un gran esfuerzo y trabajo a nivel conceptual, Sinead Gorey nos hizo replantearnos, por segundos, si aquello era real o si estábamos formando parte de una fantasía que solo los mejores son capaces de hacer realidad. Nada estaba dejado al azar, cada detalle de la decoración y cada complemento en el cuerpo de las modelos tenía un sentido y un porqué, lo que acabó de poner el broche de oro a una apuesta arriesgada, pero increíblemente acertada de la diseñadora británica.

Gemma Mondéjar
Comunicóloga. Me apasiona el arte en todas sus formas, lo que me ha llevado a dedicar los últimos siete años a la redacción y cobertura de eventos de temática cultural.

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